Kasumi-Naomi Almendras

"KASUMI"

Kasumi, una muchacha de 15 años vive, con su abuelo, su madre y su hermano menor en una antigua casa. A la espalda de esta hay un templo. En este “templo” hay un árbol sagrado con mil años de antigüedad. Hay también un pozo escondido que tiene una extraña leyenda que está unida a los orígenes de Kasumi y que existe gracias a la esfera de los cuatro espíritus. Estos orígenes tienen cientos de misterios entreverados entre ellos, pero ella nunca les prestó su atención, hasta el día en que pasó lo inesperado. Precisamente el día de su cumpleaños, su gato se escapó y se resguardó en el templo, obligando a Kasumi a ingresar en él. Estaba todo tan oscuro que ella sintió temor pero aun así ingreso en el templo. Ahí encontró al gato pero justo cuando se disponía a sacarlo repentinamente salieron unos brazos blancos que la tomaron de la cintura y la jalaron dentro del pozo. Kasumi soltó al gato al mismo tiempo que entro en un túnel de luces que la transporta a la época de las guerras civiles en el Japón antiguo. En todos sus años nunca le había pasado nada parecido. Kasumi logra ver al monstruo, mitad ciempiés mitad mujer. Ella logra liberarse gracias a un poder que surge de sus manos.

El túnel se termina y Kasumi sale por el otro extremo del pozo, dándose cuenta de que se  encontraba en un lugar completamente desconocido justo en lugar del templo había un amplio campo de flores, inmediatamente se da cuenta que se encontraba en el mismo lugar, solo que en un pasado lejano. De pronto logra divisar sobre una colina el árbol sagrado y no duda en ir donde él. Estando ya cerca se encuentra con la sorpresa de que clavado al árbol hay una extraña criatura. Esta se llamaba Isuke, él tenía un cabello largo y blanco, una vestimenta japonesa de color rojo y unas extrañas orejas de perro porque era un medio demonio, hijo de un demonio perro y de una mujer humana.
Kasumi se queda viéndolo cuando llegan los habitantes de un pueblo cercano la miran sorprendidos por la vestimenta que lleva, tomándola por espía, pues estaban en guerrillas. La atan y la conducen ante la presencia de Kaede, la hechicera del pueblo y hermana de la difunta sacerdotisa Mitsuko. Cuando ve a Kasumi reconoce en ella la reencarnación de su hermana Mitsuko, difunta hace cincuenta años. En el momento en que Kaede se da cuenta, aparece el monstruo ciempiés del pozo que  siguió a Kasumi hasta la aldea, entonces la muchacha huye escondiéndose en el bosque para ponerse a salvo, llegando al árbol sagrado. En ese momento el medio demonio despierta de su sueño. Al escuchar la voz de Kasumi pidiendo ayuda, este le implora que lo libere de la flecha que lo clava al árbol para que pueda ayudarla, a pesar que los hombres del pueblo y Kaede, buscan persuadirla, Kasumi libera a Isuke, porque lo ve como su única salvación y ella no quiere morir, así que Isuke lucha contra el ciempiés y en muy breve tiempo logra derrotarlo. Sin embargo durante la lucha el monstruo golpeo a Kasumi en el abdomen haciendo que escupiera una esfera llamada shinju, el motivo de la persecución.  Los espíritus malignos siempre andan detrás de esta piedra, la cual se supone debía estar muy lejos, pero cuando Kasumi viajó en el tiempo se trajo la esfera con ella y ahora la shinju está en peligro. Kasumi se da cuenta que también Isuke quiere apoderarse de la esfera, y que al verla con esta en sus manos se llena de rabia y se la quiere arrebatar pero no lo hace porque dice que Kasumi es muy débil y él tiene que luchar con alguien fuerte, como el para obtener la Shinju. Kasumi nunca se creyó lo que dijo Isuke, claro que este no decía la verdad, sino que Kasumi le recordaba a alguien especial. Kaede al darse cuenta de lo peligroso que puede ser Isuke ordena que le pongan un collar que tenía un hechizo. Al ponerle el collar basta con que Kasumi diga: “SIENTATE” para que Isuke obedezca.

 Los demonios han percibido la presencia de la esfera y ahora van en buscan de Kasumi, lo que le preocupa a Kaede es que Kasumi no sepa usar la esfera correctamente, por lo tanto ahora su misión es protegerla como lo hizo hace cincuenta años atrás, Mitsuko. Pero hay un pensamiento que predomina en Kasumi y es como regresar a casa.

A la mañana siguiente Kasumi se interna en el bosque en busca del pozo que la regresaría a casa pero un demonio cuervo le roba la esfera. Isuke enterado de la noticia va en busca del cuervo. Desgraciadamente este absorbe la esfera y escapa. La inexperta de Kasumi le dispara muchas veces con el arco al cuervo que consumió la esfera y se hizo más fuerte. Kasumi llega a darle al cuervo. La flecha lo atraviesa y llega directamente a la esfera que se rompe en muchos pedazos. Isuke solamente logra recuperar un insignificante fragmento de la esfera completa. Entre Kasumi e Isuke no hay una gran liga de amistad y los dos comienzan a criticarse, y es por eso que Kasumi decide volver a través del pozo a su dimensión, pero justo cuando se disponía a irse encuentra a otro demonio llamado Llura que intenta  matarla, con el fin de quitarle el pequeño trozo de la esfera que ha hallado Isuke. Kasumi rápidamente esquiva el ataque de su oponente, retrocede y cae dentro del pozo, volviendo a su dimensión. Aunque Kasumi se puede comunicar con Isuke a través del pozo, él le dice que regrese en el tiempo para derrotar los dos juntos a Llura. Isuke le pide esto porque ella es la única persona que puede visualizar el recorrido que deja la esfera. Kasumi regresa, convencida por Isuke, y conjuntamente logran derrotar al demonio descubriendo su poder en el interior de un peine mágico que utilizaba para peinar los cabellos de las personas que fallecían. Así destruyéndolo el peine destruyo al demonio.

Sakura, el príncipe de las tinieblas, medio hermano de Isuke y padre de un demonio va en la búsqueda de la tumba de su padre pero en ella se encuentra el ken, mística espada que puede matar a cientos demonios con un solo golpe. Sakura desprecia a su hermano Isuke por ser un medio demonio y ser inferior a él, sin embargo quiere encontrarlo para preguntarle en donde se encuentra aquella tumba, pues Isuke es el único que sabe la respuesta.

Mientras tanto Isuke y Kasumi  encuentran a Myoga, un simpático hombre-pulga que tiene la típica sabiduría del oriental el cual cuenta de haber sido el criado del padre de Isuke, por tanto lo advierte de estar atento a su hermano. Sakura llega y captura a Isuke, que viene acompañado de Kasumi. Gracias a Muonna, espíritu de la nada, conocen el lugar exacto donde hallan la tumba. Ya en el lugar hallan el esqueleto de su padre y al interior del cuerpo la mística espada ken. Sakura trata de cogerla pero es rechazado por una barrera mágica y solo Kasumi e Isuke pueden entrar. En el interior Kasumi logra extraer la espada para dársela a Isuke, y es así como se da a entender que la espada estaba destinada para él. La espada ha cambiado de dueño y ahora deberá obedecer a Isuke. Durante su viaje logran hallar varios fragmentos de la esfera, gracias a la ayuda de un muchacho tímido y desmañado. Luego en el camino encuentran a Ship, un cachorro semidemonio-zorro que Isuke descubre mientras este quería robarle los fragmentos de la esfera durante su descanso. Ship desea tener aquellos fragmentos para poder vengar a su padre, muerto en manos de Hiten y Mante, dos demonios con el poder de lanzar rayos gracias a cinco fragmentos de la esfera. En aquel momento Mante rapta a Kasumi fascinado por su belleza, además descubre que Isuke posee algunos fragmentos de la esfera, por tanto usa a Kasumi como rehén. Es aquí donde empieza la batalla de Isuke contra Hiten. Kasumi y Ship luchan contra Mante, ya cerca de derrotarlo, Isuke le lanza el ken y lo traspasa. Hiten fulmina su rayó contra Kasumi y Ship pero Isuke furioso arroja sobre él la vaina del ken, que absorbe los rayos y le devuelve su técnica al corazón de su oponente. Finalmente Isuke derrota al terrible demonio.

Después de otra pelea con Isuke, Kasumi vuelve al pozo porque en su dimensión tiene que regresar a sus obligaciones. Justo ese día tenía un aburrido examen de matemática, y claro que tenía que aprobar. Cuando regresa Kasumi, Isuke y Ship continúan la búsqueda de los fragmentos de la esfera y en el camino se tropiezan con los demonios-araña que intentan matar a una muchacha de nombre Nazuna. Con el poder de la espada, Isuke logra liberar a Nazuna de sus perseguidores.
Kasumi, Isuke y Ship decidieron quedarse a dormir en la casa de Nazuna, pero aquella noche sucede un acontecimiento extraordinario. Hay que señalar que no ser un demonio completo tenía sus ventajas, y eso Isuke lo tenía bien claro, cuando la luna llena aparecía en el cielo Isuke perdía todos sus poderes y se convertía en un humano común y corriente.  La mala suerte quiso que esa noche hubiese luna llena, y en efecto Isuke se convirtió en un hombre normal, No tenía las uñas afiladas y los cabellos se le pusieron negros. Isuke estaba debilitado, y eso hace que los demonios-araña que perseguían a Nazuna retomen su propósito. Isuke se niega a quedarse sentado, sin embargo cuando acude a luchar es fácilmente vencido con un mordisco que le inyecto un veneno mortífero. Myoga, el hombre pulga, aparece en ese momento y viendo el peligro de Isuke chupa el veneno y lo regresa a la vida. Kasumi y Myoga le aconsejan que se esconda. Isuke acepta y se refugia  hasta el amanecer. Ya cuando comenzó a salir el sol, Isuke recupera todos sus poderes: las uñas le crecen de nuevo y su cabello comienza a blanquearse. Guiado por la rabia se encamina a vencer a los demonios que le ganaron. La venganza lo llama y en un santiamén los derrota.

Al regresar a la aldea se enteran que las cenizas de Mitsuko fueron robadas por Urasue, una hechicera que quiere resucitar a la sacerdotisa Mitsuko para obtener los fragmentos de la esfera. Isuke descubre la cueva de Urasue quien ha fallado en su intento de volver a la vida a Mitsuko. Sin embargo cuando ve a Kasumi se le ocurre que tal vez si resucita a Mitsuko en el cuerpo de Kasumi si funcione, entonces la rapta y lleva a cabo el hechizo que le sale bien. Entonces Kasumi posee las almas de Mitsuko porque es su reencarnación, así cuando Isuke busca a Kasumi se da con la sorpresa de que Mitsuko resucito gracias a las almas que extrajo de Kasumi. Entre Mitsuko e Isuke había un sentimiento de amor, aunque la sacerdotisa lo acuso de su muerte y el la acusa por haberlo clavado al árbol con su flecha. En realidad un demonio llamado Narak había tomado los aspectos de Isuke para matar a Mitsuko y de la muchacha para clavarlo al árbol, en modo de odiarse entre ellos. Pero Mitsuko no le cree nada y le lanza una flecha a Isuke quien da un grito de auxilio. Esto hace que el alma de Kasumi vuelva a ella. Mitsuko huye de inmediato para que las pocas almas que posee no regresen a Kasumi, al no darse cuenta que Isuke la seguía esta resbaló y cayó en un abismo. Mitsuko no murió y Kasumi revivió, regresando todo a la normalidad.

Isuke, Kasumi y Ship encuentran a un joven monje llamado Miroku, que tiene la característica de enamorar a doncellas muy bellas. También el muchacho quiere vengarse del demonio Narak por una maldición que consiste en aspirar todo lo que se encuentra a su alrededor, es decir, en su mano derecha tiene un hoyó negro que aspira todo por eso siempre tenía que ocultarlo. Kasumi lo invita a unirse al grupo y buscar los fragmentos de la esfera, pero él no se les une por el momento sino después, cuando descubre que Kasumi tiene la capacidad de purificar los fragmentos de la esfera que contaminan los demonios. Pero una peligrosa alianza amenaza a Isuke y Kasumi y es que el hermano de Isuke ha formado una alianza con Narak para obtener la espada Ken, así que Narak le da un brazo humano y un nido de insectos venenosos a Sakura y todo a cambio de la matanza de Isuke. Sakura logra encontrar a Isuke, y este teme el enfrentamiento, y Kasumi también. Isuke choca violentamente con su hermano en la lucha, y este logra arrancarle la espada ken, soltando a los insectos. Los insectos ingresan al cuerpo de Isuke y lo envenenan por dentro, haciendo que lo debilite. Kasumi, que ya sabía manejar la flecha y el arco, le dispara a Sakura y lo desarma, haciendo caer la espada Ken mientras Isuke logra golpear a Sakura, el cual con mucho esfuerzo logra recuperar los fragmentos de la esfera y se lo da a Narak antes de perderlos.

Isuke es gravemente herido pero quiere seguir defendiendo a Kasumi porque no quiere que otra mujer muera en su presencia, como lo hizo Mitsuko, por eso viendo que se encontraba cerca del pozo le da un golpe lo suficientemente fuerte para hacerla entrar en él y llegue a su dimensión. Isuke había tomado una decisión, quedarse con Mitsuko, por eso ya no quería ver a Kasumi porque sentía algo más que una simple amistad. Isuke y Mitsuko se odiaron por culpa de Narak y Mitsuko murió por seguirlo. Ahora Narak, quien asesino a Mitsuko, de nuevo la está buscando, y por lo visto Isuke no permitirá que Narak se quede con ella. Él es el único que puede protegerla de ese monstruo. Si Mitsuko aun predomina en su corazón, eso quiere decir que no hay espacio para Kasumi.
Mientras tanto Kasumi piensa regresar para devolver algunos fragmentos que tenía en su casa pero sentía temor de volver a ver a Isuke. De saber que Isuke se marcharía con Mitsuko al lugar donde pertenece ella y por lo tanto la dejaría, la llenaba de dolor en su corazón pero también odio hacia Mitsuko. Es así que se dio cuenta que todo este tiempo estuvo enamorada de Isuke, quien sin querer cautivo su corazón. Isuke sentía la necesidad de hablar con Kasumi y de verla por última vez. Fue así cuando este se acercó al pozo y diviso a lo lejos a Kasumi, mirándolo directamente a los ojos. Al estar ya cerca de ella, le dijo que mientras no estuvo allí, estuvo pensando en él, también pensó en Mitsuko y en ella misma, al descubrir cuáles eran sus sentimientos hacia Mitsuko. Isuke le contesto que antes que ella llegara ningún ser humano confiaba en él. Hubo ocasiones en que Kasumi permaneció a su lado en los momentos más difíciles de su vida. Isuke se acostumbró a estar tanto tiempo con ella que cuando está a su lado se siente tranquilo y se divierte, pero él no puede estar tan feliz todo el tiempo y menos ahora porque Mitsuko sacrifico todo por él, por lo tanto el decidió defenderla con su propia vida, a esto dicho por Isuke, Kasumi pensó un momento y le dijo que hay algo que comparte Mitsuko y ella y es que las dos sienten lo mismo hacia él. Se refiere a que ambas desean pertenecer a su lado. Fue por eso que se armó de valor y fue a verlo. En ese momento Kasumi revelo sus sentimientos hacia él y le pregunto si podía pertenecer a su lado. Isuke respondió que sí. Kasumi se dio cuenta que no podía romper el vínculo tan fuerte que se tenían Isuke y Mitsuko. Eso le quedaba claro. Su deseo ahora es que Isuke siga con vida. Lo único que realmente quiere es que él sea muy feliz. Aunque Kasumi no sabía que podía hacer por él, estuvo mientras tanto a su lado.